Ignacio Godoy
Soy Ignacio. Actualmente vivo en Viña del Mar, pero soy de Valparaíso. Me gusta mucho investigar temas, de variados ámbitos, pero sobre todo de Medicina. La Medicina es mi primer interés y el segundo la tecnología.

Narrativa Personal
Soy una persona que vive en busca de respuestas y cuestionándose
lo que ya está establecido.
Decidí estudiar Medicina pues he padecido dificultades de salud que me han
hecho el camino bastante difícil, sin embargo, profesionales de la salud han
podido ayudarme en el camino al alivio, incluso de forma desinteresada.
Mi meta es ser un médico que pueda tenderle la mano a quien más lo necesite, tal como lo hicieron conmigo.
Mis intereses son la investigación en lo que respecta al uso de los anestésicos locales como reguladores del sistema nervioso.
Los vínculos con mis compañeros y compañeras que he formado y espero seguir formando se basan en la ayuda mutua en este camino y en la competencia solo consigo mismo por ser mejor.
En mi formación espero ser tratado con respeto y dignidad, de la misma forma que trato a los demás.
Mis fortalezas son mi resiliencia; a pesar de lo difícil que sea el camino siempre tengo presente que mi voluntad es el motor más importante y que mis pensamientos influyen sobre mi salud.
Mis miedos actuales con respecto a la carrera es la duración de esta y ver el tiempo pasar, sin embargo, lo importante es el camino hacia la meta y mi objetivo es aprovecharlo.
Los valores que privilegio en la Medicina son la sabiduría, para saber tomar decisiones, y así también la compasión, para nunca olvidar que quien acude en busca de ayuda es una persona y no simplemente un paciente.
Las acciones que considero reprochables en Medicina son no respetar a la
persona que va en busca de ayuda; minimizar su padecimiento.
Así también reprocho a
los médicos que ven solo enfermedades y olvidan que delante tienen a un paciente, quien es una persona integral que tiene un contexto más allá de su enfermedad.
De igual forma, reprocho la conducta moderna del abuso de prescripción de
medicamentos que no solucionan las causas de las enfermedades, sino que solo
enmascaran los síntomas.
Por último, y lo más importante, reprocho a los médicos que sufren lo que Francisco
Occhiuzzi califica como "Broncemia", cito textual:
"padecer de "importantitis" (nadie
es mejor que él). El deseo de hablar está en relación inversa con su edad y
capacidad de comprender y discernir. Y, cuando habla, sus oídos no escuchan
nada, no escucha a nadie. El bronce se acumula primero en los pies, luego
sube hasta el cerebro. Los broncémicos ya no caminan, se desplazan
majestuosamente".